A mis 20 yo rechacé mi tratamiento con el psiquiatra y era alguien autodestructivo. Mis brazos estaban siempre rallados, mis piernas también. Rechazaba estar con gente, solo la del gimnasio toleraba porque me enseñaban mucho y por ellos yo me recuperé. Ellos siempre me mandaban mensajes, llamaban, visitaban y me entrenaban pese a mi condición mental y de salud en ese momento.
Yo no, absolutamente NO me hubiera llevando conmigo mismo de hace 5 años. Pero…
No me importa como vayas a tomar porque la verdad fue de lo mejor que pasó en mi vida. Yo fui a una catedral, me fui a sentar al frente. Estaba vacío completamente, solo yo y la enorme cruz al frente mío. Pero solo a fui a sentarme a pensar en toda mi situación, en realidad, yo pensaba tratar de suicidarme esa noche. Pensaba en serio tomar unas pastillas o cortarme. Y en eso me puse a llorar y llorar, vino el padre y se sentó a mi par. No hablamos durante 10 minutos hasta que me preguntó, ¿que pasa, que me trajo a ese luga?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario